Los paraguayos han dado, este domingo 22 de abril, una muestra de civismo al llevar a cabo una elección presidencial en orden y con plena vigencia del juego democrático.
Los comicios estuvieron caracterizados por un alto grado de ausentismo. El 38% de los electores no concurrieron a los lugares de votación. Además, se registraron 130.000 votos nulos y en blanco.
El triunfador de los comicios fue el candidato del Asociación Nacional Republicana – Partido Colorado, Mario Abdo Benítez quien obtuvo 1.199.916 votos, el 46, 45% de los sufragios emitidos, derrotando al candidato de la Alianza Ganar, formada por el Partido Liberal Radical Auténtico y el Frente Guazú, Efraín Alegre que cosechó 1.103.708 votos, el 42, 73%.
La ventaja de 3,72% es la obtenida por un candidato presidencial colorado triunfador en setenta años. No obstante, los colorados obtuvieron también el control de 13 de las 17 gobernaciones.
El presidente electo, Marito Benítez, integra una corriente interna del Partido Colorado denominada “Colorado Añetete” (Colorado Auténtico) enfrentada con la facción que lidera el presidente Cartes y que se denomina “Honor Colorado”. Los “Colorado Añetete” son conservadores, defensores de las tradiciones coloradas y aún del neostroessnerismo, frente a la corriente de Cartes formada especialmente por jóvenes tecnócratas.
El empresario Mario Abdo Benítez, es hijo del ex secretario privado del dictador Alfredo Stroessner del mismo nombre, de allí que a su hijo se lo denomine “Marito” para diferenciarlo. Benítez padre era integrante del denominado “Cuadrinomio de Oro” conformado además por Sabino Augusto Montanaro, J. Eugenio Jaquet y Adam Godoy Giménez, hombres fuertes del régimen stroessnerista. Su madre es Ruth “Manon” Benítez Perrier, sobrina del influyente militar de la época de la dictadura, Rodolfo “Popol” Perrier, quien estuvo junto a su hijo cuando este aceptaba su triunfo como presidente.
Benítez heredó una considerable fortuna de su padre. Tras la caída de la dictadura, Mario Benítez padre fue procesado por enriquecimiento ilícito, pero fue sobreseído. Su hijo se convirtió en un empresario y proveer del Estado como propietario de dos sociedades.
Una denominada “Almacenamiento y Distribución de Asfalto (ALDIA, S. A.)”, que creó en 1997. Esta firma, entre los años 2010 y 2014, obtuvo contratos con el Ministerio de Obras Públicas y de la Municipalidad de Asunción por un importe de 86.92.202.975 guaraníes (unos U$S 15.575.251): Mientras su otra empresa, “Creando Tecnología, S. A. (Createc, S.A.)”, conformada en 1998, con su entonces esposa Fátima Díaz Benza, facturó al Estado paraguayo entre 2011 y 2014, 17.857.930.170 (unos U$S 3.198.053). Esta firma se dedica a la venta de materiales de construcción como ser insumos eléctricos y metálicos entre otros.
Las adjudicaciones del Ministerio de Obras Públicas a las empresas de Benítez bajaron a cero tras el alejamiento del hoy candidato del entorno del presidente Horacio Cartes. Sin embargo, Benítez reemplazó esas compras por otras provenientes de municipalidades controladas por dirigentes colorados, en especial la municipalidad de Luque, administrada por Carlos Echeverría.
Benítez, fue electo senador y durante un año ejerció la presidencia del Senado. El joven presidente electo nunca ha renegado del régimen de Stroessner por sus vínculos familiares, ni de su amistad con el nieto del dictador, Alfredo “Goli” Stroessner.
En declaraciones a la prensa ha afirmado que Stroessner hizo mucho por el país, aunque sostiene no compartir el carácter represivo y las violaciones a los derechos humanos de esos años. En 2006, cuando falleció el dictador, propuso que el gobierno paraguayo le rindiera honores como ex mandatario.
Durante la campaña presidencial, “Marito” Benítez se negó a tomar parte en los debates. Intervino tan solo en uno de ellos donde hizo un pobre papel frente al opositor Efraín Alegre.
Sus propuestas de campaña fueron por demás curiosas. Propuso reinstalar el servicio militar para “apartar a los jóvenes de las drogas” y hacer que todos los empleados públicos pertenezcan al Partido Colorado.
Ninguno de estos hechos parece haber importado al electorado paraguayo que consagró a este joven empresario en el nuevo ocupante del “sillón de los López” por los próximos cinco años.
Los analistas paraguayos desconfían de la verdadera capacidad de Marito Benítez para gobernar y creen que terminará por caer bajo la influencia de los tradicionales caudillos colorados, en especial el presidente saliente y futuro senador; el empresario tabacalero Horacio Cartés.
En otra decisión singular los paraguayos decidieron terminar con la hegemonía de 26 años del Partido Liberal Radical Auténtico en el Departamento Central. El nuevo gobernador del Departamento será Hugo Javier González, un popular presentador televisivo, disc-jockey sin ninguna experiencia política. Toda una revelación para la política paraguaya.
También ha renovado su banca como senador, líder del Frente Guazú, el ex presidente Fernando Lugo, actual presidente del Senado paraguayo.
Los candidatos electos este domingo asumirán sus cargos el próximo 15 de agosto.