El 9 de marzo, un avión de la Fuerza Aérea Brasileña, Embraer VC-99B, registrado con matricula FAB2584, transportando a una delegación encabezada por el Ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Ernesto Araujo que integraban entre otros Eduardo Bolsonaro, congresista e hijo del presidente Jair Bolsonaro aterrizó en el Aeropuerto Huari Boumediene para una escala de trece horas en las cuales recargar combustible y para que descansara la tripulación durante el vuelo de regreso a Brasilia luego de una estadía en Israel. Dado que se trata de una aeronave de tipo ejecutivo con un alcance relativamente limitado.
La escala del avión y los funcionarios brasileños se llevó a cabo sin incidentes y la aeronave partido rumbo a Brasil donde arribó sin inconveniente.
El escándalo se produjo el día 10 de marzo cuando prestigiosos medios israelíes como el diario “Yadot Ahranout”, los periodistas Itay Blumenthal y Daniel Salami en https://www.ynetespanol.com/global/medio-oriente-mundo/article/rJ8nQjoQd y en transmisiones en árabe de la BBC, así como la agencia israelí i24 News, difundieron los detalles del vuelo y la estadía en Argelia.
Inmediatamente el hecho despertó el repudio en todo el mundo árabe sobre la doble cara del gobierno del presidente Abdelmadjid Tebboune que por un lado se presenta como un activo defensor de la causa palestina y censura a quienes intentan distender la situación en Medio Oriente y por el otro negocia encubiertamente con Israel y permite la realización de esa escala de un avión proveniente de Tel Aviv en un claro acto de reconocimiento de la existencia del Estado de Israel.
El periodista druso Faisal al-Qassem, en el canal de la BBC en árabe presentó el evento con escepticismo, sin verificar la trayectoria de vuelo por parte de Euro Control. Al final de un artículo difundido sobre el tema, que incluía tuits de periodistas de Ynet, el portavoz del gobierno argelino Amar Belhimer dijo: “Nuestro país está sufriendo una campaña de difamación electrónica a la luz de su negativa a normalizar las relaciones con Israel”. El canal de televisión iraní en idioma árabe, Al-Alam, también presentó el informe basándose en otras fuentes, que manifestaron dudas respecto del evento.
Muchos internautas se mostraron molestos por los informes, pero otros manifestaron una posición diferente. “Argelia siempre estará del lado de los palestinos, pero no estaría mal si Argelia recibiera vacunas de este avión militar que vino de Israel”, sostuvo uno de ellos.
El canal libanés cercano a Hezbollah, Al-Mayadeen, que también informó sobre el caso, agregó que una fuente oficial argelina negó los reportes que señalan que un avión proveniente de Israel aterrizó en Argelia. “Tales informes son propaganda deliberada de todo tipo de elementos que quieren influir en nuestra posición contra el enemigo sionista”, declaró el funcionario.
El canal iraní Al-Alam publicó otro artículo para refutar los informes, y presentó citas de diversas cuentas de Twitter. La conclusión del artículo iraní es inequívoca: se trata de un informe falso destinado a presionar a Argelia por su posición frente a Israel.
Pese a la negativa del gobierno argelino la presencia del avión brasileño en el Aeropuerto Houari Boumediene y su ruta de vuelo están debidamente confirmados por sistemas internacionales de vuelo. Pero lo que más preocupa al gobierno de Tebboune es la versión que circula insistentemente que la presencia de la aeronave en realidad sirvió de tapadera para encubrir la entrega de un embarque de vacunas contra el Covid 19 proporcionadas por Israel para aliviar la grave situación que enfrenta Argelia por la expansión de la pandemia y la falta de vacunas.
El gobierno de Tebbonue habría comprometido algún tipo de acercamiento o distensión diplomática a Tel Aviv a cambio de recibir vacunas.
Por el momento, ni el gobierno argelino ni su homónimo israelí se han expedido sobre la cuestión pero en el mundo árabe existe la sospecha de que la negociación se ha llevado a cabo. No sería la primera vez que la doble cara de la diplomacia argelina abandona a un aliado o cambia una posición histórica cuando le es necesario y hoy Argelia se encuentra en una situación extremadamente complicada. La pandemia se encuentra sin control, sin insumos médicos ni vacunas, la economía está estancada y en crisis y el movimiento del Hirak llena las calles con descontentos todas las semanas. Esto hace muy creíble que acorralado, el gobierno lleve a cabo una acción desesperada aunque esto constituya una traición a la causa palestina que siempre ha defendido.