Bajo la creciente influencia del expresidente Barack Obama, el Partido Demócrata ha decidido ser “políticamente correcto” y designar a una joven mujer afroasiática, hija de inmigrantes y vinculada al sector más progresista del Partido, para balancear su fórmula presidencial encabezada por el candidato de más edad en la historia de los Estados Unidos (asumiría el cargo con 78 años en caso de ganar las elecciones), perteneciente al ala moderada del mismo.
Kamala Harris nació el 20 de octubre de 1964 en Oakland, California, de madre hindú tamil y padre jamaiquino. Sus padres eran graduados extranjeros que realizaban estudios de postgrado en la Universidad de Berkley. Su madre, Shyamala Gopalan era una médica oncóloga y su padre Donald Harris es profesor de economía en la Universidad de Stanford.
Después del divorcio de sus padres, a los doce años se trasladó con su madre y su hermana Maya a Montreal, Québec, Canadá donde ésta trabajó como médica investigadora en el Hospital General Judío.
Después de graduarse en 1981, Harris se especializó en ciencia política y economía en Howard, la universidad de la elite negra en Washington, D.C. Más tarde, regresó a California, donde obtuvo su “Juris Doctor” en la Universidad de California, Hasting College of the Law, en 1989. Fue admitida en el Colegio de Abogados de California en 1990.
Desarrollo una carrera de veinticinco años en la justicia de California que incluye dos mandatos como fiscal de distrito en San Francisco y cinco años como Fiscal General de California.
Kamala siempre fue una mujer ambiciosa que puso su carrera profesional y política por delante de otros intereses, como el de formar una familia y tener hijo. En 2014, a los cincuenta años, contrajo matrimonio con Douglas Emhoff, en parte para terminar con ciertas especulaciones sobre su sexualidad cuando decidió iniciar una carrera política con destino al Salón Oval. Su esposo es un próspero abogado de religión judía y con dos hijos adultos de un matrimonio anterior. Kamala no tiene hijos biológicos propios.
La persona de su círculo íntimo que tiene mayor influencia sobre ella es su hermana Maya Harris. Maya también es abogada y analista política del canal de noticias MSNBC (formado por la unión de las empresas Microsoft y NBC, emite noticias por cable las 24 horas). El primer canal de este género de los Estados Unidos antes de Fox News y CNN. Maya dejó su actividad periodística el año pasado para convertirse en la jefa de campaña de su hermana cuando aspiraba a la presidencia.
A lo largo de su vida, Kamala ha quebrado una serie de techos de cristal. Fue la primera mujer afroamericana en servir como Fiscal de Distrito en San Francisco, la primera mujer de color en desempeñarse como Fiscal General en California y la primera mujer de color en convertirse en Senadora de los Estados Unidos por California, en 2017, el Estado más poblado de los Estados Unidos con treinta y nueve millones de habitantes. Es también la primera mujer negra y asiática en ser elegida para el Senado. Ahora, es la primera mujer afroasiática en aspirar a la vicepresidencia de los Estados Unidos.
Harris es la cuarta mujer en aspirar a la vicepresidencia de los Estados Unidos, después de Tonie Nathan, en 1972, candidata por el Partido Libertario; Geraldine Ferraro que integraba la fórmula de Walter Mondale, en 1984, y que la republicana Sara Palín acompañante de John McCain en 2008. Ninguna mujer hasta el momento resulto electa para la presidencia o la vicepresidencia de los Estados Unidos.
En 2012, siendo Fiscal General de California atrajo la atención de su partido al hablar en la Convención Nacional Demócrata.
Sus posiciones políticas la acercan al sector más radicalizado del Partido Demócrata y es una clara contracara de las políticas de Donald Trump. Aunque coincide con el presidente en su apoyo al Estado de Israel. Harris considera a los lazos entre los Estados Unidos e Israel como “inquebrantables”.
Harris es una gran recaudadora de fondos aunque se niega a aceptar contribuciones de campaña provenientes de corporaciones o Comités de Acción Política que se financian de corporaciones. Recientemente y antes de ser desinada con candidata a la vicepresidencia, encabezo un evento de recaudación de fondos en línea que le reportó tres millones y medio de dólares a la campaña de Joe Biden.
Kamala apoya el matrimonio entre personas del mismo sexo, el derecho al aborto, aún después de las veinte semanas, apoya el acuerdo nuclear con Irán para evitar que este país adquiera armas de destrucción masiva. Pertenece al Estado de California, clave en la elección y con gran cantidad de aportantes a las campañas políticas. Los expertos consideran que Harris es capaz de movilizar los votos de negros, hispanos e inmigrantes.
Defiende el Informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático y la Evaluación Nacional del Clima.
La designación de la fórmula presidencial Joe Biden – Kamala Harris muestra la influencia que conserva el expresidente Barack Obama sobre el Partido Demócrata. Biden fue su leal vicepresidente y Harris es una mujer negra que merece su respeto y comparte muchas de sus ideas.
Los analistas demócratas, que descuentan el triunfo de Joe Biden, piensan que su avanzada edad le impedirá aspirar a un segundo mandato y que entonces se creará una ventana de oportunidad para el sueño de Kamala de ser la primera mujer en ocupar la presidencia de los Estados Unidos.
La pregunta es si en medio de la pandemia y con el clima de tensión racial creado por la muerte de George Floyd, el pasado 25 de mayo en Minneapolis, bajo custodia policial, que disparó las protestas en las calles del país contra el racismo, el electorado más moderado esta listo para votar por una mujer afroasiática, hija de inmigrantes, que impulsa un programa radical en favor de las minorías raciales y sexuales.