El pasado jueves 31 de marzo de 2022, en la bella ciudad costera de Dajla, perteneciente a la provincia de Ued Eddahab, región de Dajla-Ued Eddahab, en el Sáhara marroquí, el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero dejó inaugurado el Centro Internacional de Investigaciones sobre la Prevención de Niños Soldados creado y sostenido financieramente por el Reino de Marruecos.
El Centro tiene por objetivo realizar estudios e investigaciones y consultas sobre la prevención de la explotación de niños en las zonas de conflictos armados.
El director del Centro, es un profesor de la Universidad de Ottawa, Canadá, Abdelkader Filali quien adelantó que la institución recién creada proyecta realizar actividades de promoción y esclarecimiento sobre la problemática de los niños soldados en los diversos foros que integran las actividades de Naciones Unidas y colaborar con organizaciones de la sociedad civil en todo el mundo proporcionando datos precisos, cuantitativos y cualitativos para promover un accionar informado a través de la investigación académica.
Aunque el Centro tiene carácter internacional y se ocupará de esta problemática en todo el mundo dará una atención preferencial a los casos que se producen en África en general y en el Magreb en especial.
Teniendo en consideración que los niños participan en el 75% de los conflictos bélicos en curso. Según algunas estimaciones hay en este momento 100.000 niños soldados en todo el mundo y el 15% de ellos son niñas. Además, 460 millones de niños viven en zonas de conflicto y están en riesgo de ser reclutados como combatientes. Por otra parte, en los últimos veinticinco años 170.000 niños ex soldados han sido liberados y recuperados por sus familias.
Como puede apreciarse los niños soldados constituyen un fenómeno global, pero es un problema serio y recurrente en los campamentos de Tinduf donde el Ejército Popular Saharaui la milicia irregular del Frente Polisario recluta niños de hasta diez años a los que viste de uniforme, entrena en el manejo de armas e incluso en ocasiones los envía a Cuba para su adoctrinamiento y someterlos a entrenamiento militar especializado.
Esta aberrante práctica es considerada tan habitual por los dirigentes del Frente Polisario que, durante la visita a los campamentos de Tinduf del enviado especial de Naciones Unidas para el Sáhara, Steffan de Mistura, este debió presenciar el trágico espectáculo, tal y como recogieron diversos medios y se denunció públicamente, de un desfile militar infantil en su honor.
Por otra parte, el Frente Polisario nunca ha negado el reclutamiento de niños para sus milicias.
Lamentablemente, esta tampoco es la única forma en que el Frente Polisario abusa de los niños marroquíes nacidos en Tinduf donde sus padres se encuentran retenidos desde hace más de cuatro décadas viviendo en condiciones infrahumanas.
Los niños son enviados a España para participar del Programa de Vacaciones en Paz donde deben tomar parte en campañas propagandísticas a el riesgo de quedar retenidos en los hogares de acogida y apartados para siempre de sus familias y de su cultura.
En otras ocasiones son enviados a Cuba supuestamente para recibir educación media y superior. Su estadía puede prolongarse por años incluso décadas hasta que un día los dirigentes polisarios los requieren y deben retornar a un país que ya no recuerdan e iniciar una nueva vida en medio del Sáhara argelino rodeado de miseria, precariedad y falta de un futuro.
El terrible destino que aguarda a la casi totalidad de los niños de los campamentos de Tinduf ha conmovido a Su Majestad el Rey Mohammed VI y al pueblo marroquí convenciéndolos de que deben trabajar para poner fin a esta cruel explotación.
El rey Mohammed VI esta convencido que la totalidad de la población marroquí de origen saharaui retenida contra su voluntad en Tinduf debe retornar lo antes posible a su hogar ancestral en Marruecos y la creación del Centro Internacional de Investigaciones sobre la Prevención de Niños Soldados es una forma de mostrar al mundo el cruel destino que aguarda a los niños y jóvenes de los campamentos.
Al mismo tiempo, el Centro también permite extender la solidaridad de Marruecos a otros niños que en África y en el resto del mundo se ven sometidos a este infame destino.
El Centro Internacional de Investigaciones sobre la Prevención de Niños Soldados es también una institución marroquí más que se suma a los esfuerzos del Reino para lograr una plena vigencia de los derechos humanos en África.