EL DISCURSO
El Rey de Marruecos en su discurso de inauguración de la onceava legislatura comenzó destacando los logros alcanzados por el Reino en la implementación de los comicios del pasado 8 de septiembre.
Estos logros fueron la realización en orden, con clima democrático y alta participación electoral asegurando la alternativa de los partidos políticos en el gobierno tal como ocurre en las democracias desarrolladas de Occidente.
El monarca destacó que Marruecos vive una nueva y más distendida etapa de la pandemia del COVID 19 después del avance de la vacunación, en la que sin embargo la población no debe descuidar las medidas preventivas.
Al mismo tiempo, el rey Mohammed VI, señaló con optimismo los indicadores positivos de recuperación que muestra la economía marroquí en medio de la retracción general del comercio internacional y en especial de la crisis que afecta a otras economías africanas. Así el monarca alauí mencionó:
– El crecimiento del 5,5% en el PBI.
– Crecimiento del 17% en el sector agrícola.
– Incremento del 16% en las inversiones extranjeras.
– Un 46% de aumento en las remesas de los marroquíes residentes en el exterior.
– Un 1% de inflación anual.
Al mismo tiempo, el Rey Mohammed VI mencionó la necesidad de preparar al Reino para afrontar “una coyuntura cargada de múltiples retos, peligros y amenazas” para lo cual dispuso la creación de una “reserva estratégica de productos básicos, particularmente alimenticios, sanitarios y energéticos” con el objeto “de reforzar la seguridad estratégica del país” frente a cualquier eventualidad.
Por último, el monarca alauí asignó al nuevo gobierno que votó el pueblo marroquí y él consagró el pasado jueves, la responsabilidad de implementar el “Pacto Nacional para el Desarrollo” y de finalizar exitosamente los grandes proyectos de desarrollo que el Reino ha lanzado en los últimos años.
EL NUEVO GOBIERNO
El discurso del Rey Mohammed VI sucede al nombramiento de un nuevo gobierno de coalición que, por primera vez desde la reforma constitucional de 2011, no incluirá a ministros del Partido Justicia y Desarrollo considerado de orientación islamista.
En nuevo gobierno compuesto por veinticuatro carteras será presidido por el dirigente que resultó triunfador en los comicios legislativos, regionales y locales del mes de septiembre, Aziz Ajanuch, líder del nucleamiento centrista Reagrupamiento Nacional de Independientes.
Los otros dos partidos que forman la coalición de gobierno son el liberal de izquierda Partido Autenticidad y Modernidad y el histórico nacionalista Partido Istiqlal, cuyo secretario general Nizar Baraka regresa al gabinete como Ministro de Equipamiento y Agua.
Los nuevos ministros son hombres y mujeres con gran experiencia en la gestión pública adquirida ocupando cargos de ministros, walis (gobernadores), alcaldes y otros puestos administrativos de gran responsabilidad.
El Rey Mohammed VI mantuvo a los funcionarios de los ministerios de soberanía que él tiene la responsabilidad constitucional de designar: ministerio de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes residentes en el extranjeros, Nasser Bourita, ministerio del Interior, Abdelouafi Lafti; ministro de Habices y Asuntos Islámicos Ahmed Toufiq y el ministro de Defensa Nacional Abdellatif Loudiyi.
El partido vencedor en los comicios Reagrupamientos Nacional de Independiente retuvo el control de los siete ministerios de mayor peso para el control de la economía: Economía y Finanzas, Agricultura y Pesca, Transporte, Sanidad, Transición Energética y Relaciones con las cortes.
Cabe destacar que en un país árabe, islámico y africano, el nuevo gabinete de ministros tiene un treinta por ciento de mujeres y por primera vez una mujer, Nadia Fettah Alaoui, será la ministra de Economía y Finanzas.
Además, muchos de los nuevos ministros se han formado académica y profesionalmente en Europa y además de funcionarios son docentes universitarios.
Con este nuevo elenco ministerial que marca la alternancia política pero también la continuidad de un modelo de desarrollo que prioriza la causa nacional de los marroquíes y prepara al país para afrontar cualquier contingencia bajo la supervisión estratégica de un auténtico conductor y estadista el Rey Mohammed VI